Rodolfo Jiménez agregó que la reivindicaciones de una educación pública, gratutira, de calidad y laica también interpretan a la ASOACAD. Por ello, cuestionó la falta de respuesta de las autoridades frente a este movimiento. “Hay bastante sordera. Si bien todo el mundo hoy día habla del tema de la educación y de la calidad, en la práctica no se ven avances reales en lo que son las demandas del movimiento estudiantil”, precisó. Dijo que beneficios como las becas y otros programas implican mejoras, pero no apuntan al centro del problema, es decir, un modelo enfocado a la privatización de la educación.
Por otra parte, el presidente de la ASOACAD señaló que, como organización gremial, suman como una demanda particular el término del proceso de exoneraciones arbitrarias que afecta a los académicos de la USACH hace un año. “Pensamos que la forma de asegurar que en instituciones como la nuestra no se produzca la arbitrariedad es avanzando en la democratización interna (…) Una universidad que está regida por un estatuto que viene desde la época de la dictadura va a ser siempre una tentación muy alta para que cualquier autoridad pueda hacer uso arbitrario de las atribuciones que la ley le confiere. Es más, pensamos que son atribuciones ilegítimas porque se derivan de una institucionalidad configurada en la época de la dictadura”, concluyó Rodolfo Jiménez.